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viernes, 6 de enero de 2017

Martes, 3 Enero, 2017 - 22:38

Carácter, orgullo... ¡y Davin White!

Habrá dificultades, habrá obstáculos, pero hemos venido a darlo todo”. El Iberostar Tenerife llevó a la práctica una vez más una de las frases de su campaña promocional de abonos 2016-17 para superar este martes noche un nuevo Desafío y 'asaltar' el Rhenus Sport del SIG Strasbourg (72-75), vigente subcampeón de la Eurocup y uno de los gallitos del basket francés.

El grupo de Txus Vidorreta firmó una exhibición de carácter y orgullo en un partido que se le puso realmente cuesta arriba y que acabó decidiéndose en un final de infarto, gracias a un triple de Davin White a tres segundos del cierre.

Un último cuarto de fe y confianza en sus posibilidades para levantar una desventaja que llegó a ser de ocho puntos (52-44, 31'), sobreponerse a un duelo tremendamente físico y a lo mucho que apretaban los mas de 6.000 aficionados del recinto galo, explican en parte el triunfo de esta noche.

No fue nada sencillo salir airosos de una cancha invicta hasta hoy este curso en el certamen continental, entre otras cosas porque los tinerfeños se toparon un con rival muy duro atrás y con calidad en todas las posiciones. Arrancó no obstante muy centrado el conjunto insular, que aprovechó el oficio de Aaron Doornekamp al poste bajo y el buen hacer de Bogris en la pintura para firmar una buena puesta en escena (10-14).

No tardó en reaccionar el Strasbourg, mucho más acertado en el triple (5/10 al descanso por el 2/12 aurinegro), lo que le sirvió para irse al intermedio con cuatro puntos de ventaja, pese al buen trabajo atrás de los canaristas, cuyas alternativas defensivas desorientaban por momentos a los anfitriones.

Crecía el partido de todas formas ligeramente a favor de los locales, especialmente porque los triples no le acababan de entrar a un equipo, el Iberostar Tenerife, que sin embargo no se rindió nunca. La capacidad de Lacombe para anotar mantenía a los franceses con pequeñas rentas en el electrónico, que llegaron a alcanzar los ocho puntos al inicio del último cuarto.

Una vez ahí, con todo en contra, incluidas varias decisiones controvertidas de los árbitros, el Canarias tiró de orgullo e igualó el tremendo listón físico que habían fijado los galos. Varias acciones de mérito de Tim Abromaitis, otro arreón defensivo de los de Vidorreta y la fe de los tinerfeños pusieron en serios aprietos al Strasbourg. En esa dinámica, con el partido chico a chico, ambos equipos intercambiaron aciertos desde el 6,75.

Llegaron entonces varias canastas claves de Doornekamp y San Miguel y, sobre todo, unos últimos minutos mágicos de Davin White. Lejos de esconderse (llevaba 1/8 en triples), el genio de Phoenix asumió la responsabilidad y firmó un epílogo para enmarcar. Y eso que enfrente, AJ Slaughter trató de hacer lo propio con siete puntos consecutivos y un triple que igualaba la contienda a 72 a falta de 29 segundos.

En la última posesión, el Iberostar hizo llegar el balón a su hombre más caliente y Davin lo volvió a hacer. Igual que sucediera en otros partidos, como en Avellino por ejemplo, el estadounidense agotó la posesión para anotar un triplazo de más de siete metros a falta de tres segundos para el cierre.

El tiro a la desesperada de los locales no tocó aro y los aurinegros certificaron una victoria de mucho mérito, que afianza su liderato y aumenta más si cabe sus opciones de pasar a la siguiente ronda en puestos de privilegio para intentar salir exentos del cruce de 1/16 de final, circunstancia que conseguirán los cinco líderes de grupo y los tres mejores segundos.

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