Iberostar Tenerife-Morabanc Andorra
El Iberostar Tenerife perdió su partido de presentación ante la afición aurinegra por un apretado 81-83 que en realidad no refleja lo sucedido en la mañana del domingo sobre el parqué del Pabellón Santiago Martín de La Laguna.
Con el apoyo de las peñas y poco más de tres mil aficionados que acudieron a la cita de la inauguración doméstica del curso baloncestístico, se esperaba un mejor rendimiento del equipo de Alejandro Martínez ante un Morabanc Andorra reforzado en todas sus líneas y que, a buen seguro, formará parte, superado el escollo de la permanencia, de esa liguilla particular de equipos que aspirarán junto con los tinerfeños a una de las últimas plazas de aspirantes al playoff final por el título.
Los pupilos de Joan Peñarroya dominaron el partido desde el salto inicial, siempre estuvieron por delante en el marcador y llegaron a alcanzar réditos de hasta 14 puntos de ventaja. Los tinerfeños se acercaron en varias ocasiones pero terminaban cediendo de nuevo, sobre todo por la inconsistencia defensiva.
Al descanso, los andorranos se retiraron al vestuario con una exigua ventaja (39-42) a pesar de que dominaron la primera parte merced al rebote y al acierto desde la línea de 6'75. Sin embargo, la entrada desde el banquillo de Xavi Rey y Javier Beirán (a la postre, los dos mejores canaristas) habían dado otro aire a las líneas locales que aseguraron mejor el rebote y pudieron correr algún contraataque.
La pedrea de puntos estuvo bastante repartida entre los locales pues hasta seis jugadores alcanzaron los dobles guarismos en su estadística anotadora: Xavi Rey fue el máximo encestador con 14 puntos y Beirán se volvió a convertir en el principal cazarrebotes con 8 capturas.
La segunda parte fue casi un calco de la primera. Otra ligera recaída defensiva en el tercer cuarto truncó las ilusiones del graderío por conseguir la primera victoria en la puesta de largo del equipo aurinegro.
El partido tuvo cinco minutos finales trepidantes en los que los tinerfeños trataron de enmendar el desaguisado de los treinta y cinco anteriores. A falta de pocos segundos, se colocaban a un punto en el marcador gracias a un triple lejano de Rodrigo San Miguel.
Pero no había tiempo para mucho más ni los de Alejandro Martínez merecieron una victoria que sin duda llegará en cuanto esos cinco minutos finales de incontinencia y tesón defensivos de que son capaces los jugadores de nuestro equipo se conviertan en una constante de su juego. Como ya han demostrado en temporadas anteriores.
¡Canaaaariaasss!
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