“Fue bonito
mientras duró”, eso es lo que pensábamos todos los que escuchábamos el
resultado final del partido que disputó el CB Canarias en tierras malagueñas
ante el Unicaja y que acabó con un 88 a 67 para los locales.
La
diferencia no hace justicia al trabajo realizado por los aurinegros que
mantuvieron entre las cuerdas a un grande del baloncesto español, pero desde la
mitad del tercer cuarto hasta el final las fuerzas flaquearon y el ataque no
fue tan efectivo como en la primera mitad en la que nos fuimos al descanso ganando
35 a 38.
Nuestros
chicos dieron la cara, los veteranos salieron
como revulsivos, no podemos desmerecer el trabajo de Rost, de Jakim, de
Richi, de Fotis, de Úriz, de Richotti, de Saúl, de Sekulic o de Heras, aunque
para estos últimos no parece que fuera un buen día. Es verdad que pareció que
“las pilas” se fueron agotando, pero sabemos que NUNCA bajaron los brazos, así
que EQUIPO cabecita bien alta, a descansar unas horitas y a prepararse que el
domingo volvemos a jugar fuera, esta vez ante el Caja Laboral en Vitoria y
quién sabe lo que puede pasar.
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